Recuerdo el día en que nos conocimos. Tú estabas ahí, de traje, con tus amigos, cuando te ví... Hoy reconozco que esa noche ni siquiera imaginé que me enamoraría de tí, pero hoy, después del largo camino compartido, sé que no podría haber sido de otra manera pues tú y yo estabamos destinados a conocernos, ya que sin habernos visto nunca, parecía como si nos conocieramos de toda la vida... Nunca olvidaré ese 10 de noviembre de 2006, siempre en mi corazón.-