sábado, 16 de mayo de 2009


Me cansé, quiero volver a nacer. Quiero salir, quiero vivir, olvidarme de todo y pensar en mí. Quiero mirar una peli repetida, fumar a escondidas. Soñar despierta con tu voz, quedarme ciega de tanto mirar el sol. Quiero cansarme de escuchar la misma canción, dormirme mirando televisión, llamarte sólo para escuchar tu voz. Jugar al poliladron con vos, saltar la soga, inventar una poesía que no rime ni se trate de amor. Quiero cazar bichitos de luz, comerme un bubaloo, sentir que todo lo puedo, sentir que todo es juego. Quiero volver a nacer, vivir todo otra vez. Sin penas ni orgullos, sin llantos ni disgustos. Sólo quiero volver, pero conociéndote otra vez.

Me siento mejor si sé que estás feliz, y en cuanto me dices lo mucho que me extrañas, que no puedes olvidarme, desmorono por fuera, y por dentro, por dentro siento la seguridad de saber que he hecho las cosas bien, pues dejé una marca mía en tu piel. A eso apunto siempre que caigo en esta puta trampa, de ver quién abandona primero. Yo, por mi parte, siempre salgo perdiendo. Y recibo algún mensaje furtivo de no haberme salido de ti, entonces te digo que me debes olvidar, y cuando escucho tu susurro decir que no puedes. Lloro por fuera, trato de mostrarte lo mala que soy, pero por dentro sé que más te gusta, que eso te enamoró, que mi estúpida necesidad te conquistó. Y lo único que consigo es que me quieras más, más, siempre que me veas, un poco más. Y pone mal, me bardea no sentirme pésima por haberte hecho cagar, por escapar de mis tesoros más rápido de lo que los encuentro. Me saca no ser constante, y querer escapar cada vez que pronuncian la palabra compromiso. Me pone mal, saber que sólo con él quiero una relación, sólo con él quiero formalidades, quiero paseos de la mano, sólo con él mañanas y noches, sólo con él esa palabra me hace sentir bien. Me desequilibra que no pueda ser con vos, porque siempre termino entendiendo lo mucho que me querías.

No, no puedo evitar recordar. Si tan sólo pudiera olvidar. Si tan sólo pudiera. Y Nostalgia lo sabe. Sabe que no he podido olvidar. Sabe que pienso en aquello que no fue. Sabe que de tanto en tanto no soy tan fuerte y que siento mis manos vacías. Sabe que de tanto en tanto quisiera la ternura que no me atrevo a admitir. Sabe de aquellas noches insomnes en las que agobiada por todos aquellos recuerdos no puedo dormir. Lo sabe y con la batalla ya ganada sólo espera. Mientras tanto yo miro por la ventana e intento ignorarla. Intento mantenerme a flote. Intento sobrevivir de a un solo día cada vez. Aunque sepa que tarde o temprano mis ojos vacilarán, mis manos se sentirán vacías y sentiré una profunda Nostalgia apoderándose de mi alma. Porque ella llegó de visita, y no se irá tan fácilmente. No, no se irá.

Debo dibujar una gran y falsa sonrisa en mi rostro frente a los demás, y guardarme las lágrimas para mi, sólo para mi. ¿Por qué tengo que aparentar que todo esta bien cuando no es así? Cuando realmente solo tengo ganas de llorar y llorar por ese gran dolor que todos a mi alrededor producen. Debo guardar todas las lágrimas y esperar que llegue la noche para poder soltarlas y mojar la almohada, no teniendo a nadie ni a nada que me sirva de consuelo, ni que me pueda explicar porqué ocurren estas cosas, ni que pueda responder a mis preguntas y ni siquiera a nadie que tan sólo seque las lágrimas de mi cara. Pero al rato todo queda olvidado y el sueño se apodera de mí, al otro día hay que volver a dibujar esa gran sonrisa en la cara y dejar las lágrimas en la almohada.

Te dejé mis preocupaciones, mis manos traspiradas, mis risas y mis anhelos; te dejé mis caprichos, mis influencias, mi música, mis pasatiempos; te dejé un par de llantos y juegos de mesas, algunas caricias y todas mis dudas. Y de verdad no me acuerdo como sigue esto, pero ... Sí, es verdad. Hoy vuelvo a hablar de vos. Hoy de nuevo pienso en vos. Te juro que no quiero que sea así, que hago todo lo posible para olvidarte, para sacarte de mis pensamientos. Me prometí nunca decirte cuánto te necesitaba, cuánto quería que te quedaras conmigo para aliviar esa despedida, para hacer las cosas más fáciles. Me prometí no caer otra vez en lo mismo. No llorar, no regalar mis lágrimas por los rincones. No puedo hacerlo. Fracasé en todo lo que prometí no volver a hacer. De verdad no puedo hacerlo, y me decepciona tanto querer no pensar tanto en vos, y sin embargo sos lo único que realmente necesito ahora. Todo el día pensé que ibas a llamar, en todo el día no me despegué siquiera un segundo de acá, y sin embargo es tan temprano. Y todavía te extraño. Creo que de alguna forma el tiempo va a decidir que hacer conmigo. Todo era tan perfecto. Te juro que no me arrepiento de nada y no imagino que hubiera pasado si de verdad siguieras acá, si hubiera pasado más tiempo entre nosotros.

Ensayo caras para el día que te vuelva a ver, pienso ignorarte, rechazarte, que te des cuenta de lo que perdiste, de lo equivocado que estás. Por otro lado no logro entender por qué sigo tan pendiente de vos, por qué estoy tan asustada. Antes pensaba en vos todo el tiempo, ahora escucho alguna canción de amor y evito pensarte. A lo mejor es solamente costumbre y no un sentimiento reprimido. Cuando pienso en volver a verte me imagino fabricando caretas, en defensa constantemente. Y sinceramente no me siento preparada para hablarte, no quiero hacerlo y tampoco creo que sea necesario. Quiero olvidarme de todo. La última vez que nos vimos te pusiste nervioso y eso me hizo sentir segura, por eso me viste tan tranquila, pero no sé que hubiera pasado si me mirabas a los ojos. Tampoco sé que sentiría. Algún día lejano nos vamos a cruzar y no tengo idea de lo que va a pasar, el tiempo tiene todas las respuestas y seguramente vamos a estar preparados, con las cosas en claro y vamos a volver a ser dos desconocidos. Solo sé que tengo ganas de seguir con mi vida, conocer un verdadero amor y que el miedo no me hunda en un pozo de soledad. Por tu lado espero que te des cuenta de las cosas, de eso que no tenés presente: El amor. Algún día te vas a entregar a alguien y espero que no te haga lo que vos hacés. Quizás me tengas en cuenta el día que madures pero supongo que voy a estar muy lejos tuyo en ese momento. No sé que sentís, pero me convencí que lo mejor va a ser olvidarme de vos. Y no te odio, solo quiero olvidarte. Ojalá cambies porque los años pasan, uno va necesitando lo sólido, lo concreto. Ya estás grandecito para llevar esta vida. Yo por mi parte prefiero tomarlo como una ilusión pasajera, un loco recuerdo. Tengo tanto por vivir y tantas ganas de hacerlo que no voy a retenerme en algo que pudo ser y no fue.

Dueles, y mucho, te echo de menos. No pudo ser, ya lo sé, pero desde el principio ya lo sabías. Dueles. Demasiadas cosas hubieron que tú nunca sabrás. Demasiadas cosas me hiciste sin darte cuenta que nunca te diré. Demasiado tiempo esperando una respuesta. Demasiado tiempo preguntándome qué paso, qué fue lo que hice mal. Ya no te quiero, es cierto, pero no porque mi corazón haya dejado de pensarte, sino porque las heridas aún no han cicatrizado y aún duelen. Fuiste mi todo: mi alegría, mi pena, mi vida, mi ilusión, mi decepción, mi dolor. Lo fuiste todo, lo bueno y lo malo, lo alegre y lo triste. Dueles, pero en mí ya no hay rencor, no serviría de nada que lo hubiera. Dueles, pero ya te estoy olvidando.

Me cansé de mí, de mis pensamientos, me cansé de llorar para sentirme bien, me cansé de pensar que vendrán tiempos mejores, me cansé de sonreír y decir Estoy bien. Me cansé de poner el mismo CD cada vez que pienso en vos, me cansé de tener que ser yo la que inicia la conversación, me cansé de preguntarte que te pasa, me cansé de tu indiferencia, de tu rechazo. Me cansé de caminar por las mismas calles, el mismo colectivo; el mismo tren, los mismos asientos, los mismos caminos; la misma gente; la misma rutina. Me cansé de mi ropa, de mis complejos, me cansé de llorar, de pensar, de sentir, me cansé de arruinar todo, de no iniciar nada. Sí, me canse de todo lo que me rodea, pero es cuando me canso de mí que empiezo todo de cero. Aprendí con el paso del tiempo a convivir con mi propio hartazgo, a remar contra mi rutina, a luchar contra mis miedos y a evitar los errores. Hoy puedo estar harta de mí misma, pero siempre te estaré observando. Porque aunque me canse de mí, aún no encontré la fórmula para cansarme de vos.

Escúchame, no digas nada, sólo mírame a los ojos y deja que mis palabras lleguen a tus oídos, permite que mis manos te expliquen lo que siento por tí, que en un beso pueda decirte que eres todo para mí, que en una mirada intente describir la emoción que provocas al tomar mi mano. Escúchame, sé que no sientes nada por mí, que piensas que esto no puede ser, que existen mil pretextos para no arriesgarte, que crees que vas a llorar y sufrir una vez más, pero te has equivocado, porque si me regalaras una noche te entregaría mi esencia, te besaría como nadie jamás lo ha hecho, te regalaría mi corazón sin pedir nada a cambio.
Si nada es para siempre, ¿Por qué sigo dando vueltas? ¿Por qué vuelvo a pasar una y otra vez por el mismo lugar, por los mismos recuerdos? En algún momento del camino los pierdo, pero vuelven. O yo vuelvo a ellos, es igual. Quizás yo me alejo y vos los acercás. Siempre te ingeniaste para volver, para desarmar mi vida, desordenar mis pensamientos. Siempre volvés, o yo vuelvo. Y es el mismo círculo. Distintas direcciones. Pero siempre en algún punto del camino te vuelvo a encontrar, o vos me encontrás a mí, no sé. Es igual. Es la misma parodia que se repite una y otra vez. Tu sonrisa, mis lágrimas. Tus ojos, mi cielo. Tus abrazos, tu respiración en mi cuello. Mis besos, los tuyos. Y la realidad que se filtra, la distancia que se pone en el medio. Los recuerdos que se pierden, y en un segundo más ya no te veo, no te escucho ni te siento.

Cansada de no poder pensar en otra cosa. No existe otro motivo por el cual yo siga acá. Cansada planear días diferentes, y que sin querer terminen violentamente, tan distinto a lo que esperaba. Cansada de llorar, de dejar frases incompletas; de pensar en lo que pudo ser y encontrarte en todo momento. Cansada de escuchar solo reproches, y extrañar un te quiero al final del día. Cansada de tropezar con mis errores una y otra vez, no importa cuanto suplique. Estoy cansada de pedir perdones y permisos. Y aún así, yo nunca te pediría que te fueras, y sabés que vos nunca me dejarías ir. Cansada de censurar pensamientos, de necesitar tus besos. Y aún así, no existe otro motivo por el cual yo quiera seguir acá.

Despues de ti no hay nada MAS

Despues de ti no hay nada MAS

Cuando pienso que el mundo es frio, triste y cruel, aparece alguien como vos y arruina todo GRACIAS!

Empezaron a atormentarme una serie de reflexiones que no se me habian ocurrido antes

Empezaron a atormentarme una serie de reflexiones que no se me habian ocurrido antes
no sabia que me proponia a herirlo tan despiadadamente

Esta actitud puede parecer una locura, pero se verá hasta que punto estuvo justificada...

Esta actitud puede parecer una locura, pero se verá hasta que punto estuvo justificada...
Tambien el parecia estar solo

No pasa nada, estoy mas normal que nunca y SIEMPRE escucho esta cancion

No pasa nada, estoy mas normal que nunca y  SIEMPRE escucho esta cancion
El amor es como las plantas, necesita agua, luz, y muchos cuidados

Hablas y no te escuchas, deberias aprender que esto no se basa de pretextos

Hablas y no te escuchas, deberias aprender que esto no se basa de pretextos
Es que no existe modo de perderme en tus silencios cuando callas ese te quiero

Y llegaste tu y me has inundado mi alma de tranquilidad

Y llegaste tu y me has inundado mi alma de tranquilidad
Me has llenado el corazon de vida

Si te sientes perdido con tus ojos no has de ver, hazlo con tu alma y encontraras la calma

Si te sientes perdido con tus ojos no has de ver, hazlo con tu alma y encontraras la calma
Siento del viento celos por acariciar tu cara cada mañana